La mejor opción es coger las maletas y plantarse en Ciudad Real para darse un chapuzón de representaciones. Desde 1977 que se abrio el telon, el festival ocupa casi todos los espacios de la ciudad.
Apunta.
Los grandes clásicos, como siempre, presentes:
Molière (
El misántropo y
Las mujeres sabias),
Lope (
Fuenteovejuna) o
Cervantes (
La gitanilla,
El coloquio de los perros...). También grandes intérpretes:
Juan Diego hace de Sancho en un montaje del director del Festival,
Emilio Hernández;
Nacho Duato con su
Compañía Nacional de Danza 2 y tres montajes que prometen: uno con música veneciana y napolitana de los siglos XVI y XVII, otro de clásicos del romanticismo, y el tercero:
Enrique Granados. No podían faltar habituales como la
Compañía Nacional de Teatro Clásico, que cumple 20 años. Representan para la ocasión
Don Gil de las Calzas Verdes de
Tirso y
Amar después de la muerte de
Calderón –el cumpleaños se conmemora además, con una exposición-. Otra compañía de prestigio: la
Royal Shakespeare Company lleva a escena por primera vez los
Cuentos de Canterbury de
Geoffrey Chaucer, una cita obligada. Y la gran
Carmen Linares pone el duende con su flamenco. En la calle continúa el espectáculo: se recuperan las rutas de
La Barraca rindiendo homenaje a la agrupación lorquiana. Y mucho, mucho más.
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Festival de Almagro